sábado, 19 de diciembre de 2015

"Falsos monumentos", Mi Última Solución

Pinhead Records (Gentileza Rock City)
Grabado entre enero y febrero de 2015 en Infire Studio.
Producción artística: Mi Última Solución y Javier Casas.
Ingeniero de grabación y mezcla: Javier Casas.
Masterizado por Javier Casas.
Producción ejecutiva: Rodrigo Vidal para Innova Producciones.

Editado el 27 de marzo de 2015

Sebastian Vazquez, voz
Taiel Pomes Figueroa, guitarra y coros
Luciano Di Mieri, guitarra
Pipi Astete Navarro, bajo y coros
Tobias Gomez Antolini, batería y coros

Segunda producción discográfica de esta interesante banda post hardcore de Buenos Aires. Son 12 temas que van al hueso una y otra vez con una impronta que deja con la boca abierta a más de uno seguramente. Desandan caminos que motivan sus propias existencias de búsqueda con una filosofía barrial clarificadora de un mensaje por demás elocuente de encuentros y desencuentros. Quien alguna vez tuvo la necesidad de salir de sí mismo para lograr verse desde afuera se sentirá identificado con ciertos pasajes que emanan soledad como esas molestas pero maravillosas lluvias invernales caminando sin rumbo con la mirada en el infinito. La sensibilidad se cruza con la aspereza generando un sonido asemejable a Catupecu Machu, Pantera y cual banda con voces guturales limitadas haya bajo el firmamento. La estética vocal con base melódica y armonías profundas dicen presente en temas como "El fin de mi calma", una perfecta mixtura rock punk con bases stoner y doom se advierte en "Sur" con interesantes coros. "De pie" y "Felina" son los temas que traen sin demora la referencia obligada de los Catupecu y en "Vendetta" y "El exilio del rey" son el power en sí mismo sin fisuras y en la misma línea pero un paso más allá nos regalan "Del viento" - con ciertos aires doom - y "Sombras" donde se pueden apreciar machaques y pasajes de batería descollantes, siempre palo y palo. La voz de Sebastián Vázquez se ajusta a las necesidades de MUS y un detalle que no me llamó la atención pero que me resultó muy acertado fue el hecho de sostener las sílabas en cada intervención que lo ameritaba. "Ruinas" es, quizás, el tema que carezca de tanta pesadez pero con fuerza e intensidad de algunos toques acústicos. "El fuego dentro nuestro" tiene intensidad y profundidad con una fórmula un tanto trillada pero con la personalidad y efectividad que la banda logra delinear a lo largo del álbum. Javier Casas es un profesional de nivel y queda demostrado a lo largo de cada tema en cuanto - entre otras cosas - a la mezcla. Una banda soberbia con un disco tremendo que no admite pasar desapecibido, hay que escucharlo con atención.